Comunidad que acompaña y se deja acompañar…
- Edwin Fernando Cárdenas
- 14 jul 2016
- 2 Min. de lectura

Es grato compartir con todos los hermanos que desde el pasado mes de Mayo hasta finales de Julio, la comunidad del Posnoviciado acoge y acompaña a un grupo de jóvenes y señoritas que se encuentran discerniendo su opción por ir o no al año de experiencia del voluntariado. En grupos distintos y cada uno según su personalidad, vive con cada uno de los hermanos -formadores y posnovicios- la experiencia de ser y hacer comunidad; espacios como la oración, el deporte, las comidas y reuniones de distinto tipo contribuyen para que estos jóvenes tengan un primer acercamiento hacia lo que podría ser el sueño de ser “Vida y esperanza“.
Como jóvenes en formación inicial sabemos que quien no ha sido acompañado tampoco puede acompañar y de ahí el desafío que tenemos como formandos de continuar haciendo camino con nuestros directores espirituales y acompañantes; experiencias muy concretas como estas te ayudan a que tomes conciencia de la gran responsabilidad de hacer un buen camino con todas las herramientas que te brinda la congregación a través de la formación inicial. Es muy satisfactorio el saber que los jóvenes confían en ti y que de alguna manera te has ganado su confianza y te están dejando que “entres en su vida”, pero es al mismo tiempo un mayor compromiso que vas asumiendo y desde la experiencia buena o no que has realizado antes podrías contribuir de forma más eficaz o no en el crecimiento de jóvenes y señoritas que somos conscientes nos confía el Señor.
Por último, compartirles también que como casa de formación estamos en nuestra etapa final de Universidad y algunos hermanos también van cerrando etapas como la del Posnoviciado; para el mes de Agosto Luis Angel tendrá que integrarse a la comunidad de Esmeraldas, Remberto al Prenoviciado y Edwin a Wasakentsa en su inmediata experiencia de tirocinio; para esa misma fecha se integrarán nuevos hermanos que también ahora concluyen su noviciado en Venezuela.
No es fácil un seguimiento radical del Señor en estos nuevos tiempos pero estamos seguros de que la gracia continúa actuando en cada uno de nosotros; seguimos apelando a su oración personal y comunitaria por cada uno de los que hermanos que nos encontramos en casas de formación para seguir con mayor convicción el deseo de entregarnos por completo a los jóvenes tal cual lo hizo Don Bosco
Comments